06 Jul Ejercicios para el prolapso. Descubre qué es y cómo mejorarlo.
¿Te han diagnosticado un prolapso? ¿Tu ginecólogo o médico de confianza, te ha pedido hacer ejercicios para el prolapso? ¡Qué no cunda el pánico! No sé si es la primera vez que escuchas hablar de prolapso, pero en cualquier caso, para trabajarlo lo primero que tenemos que hacer es entenderlo.
Antes de hablar de ejercicios para el prolapso…¿Qué es un prolapso?
Descenso o herniación (salida) de uno o varios órganos de la cavidad pélvica debido a la pérdida o debilidad e el soporte de las estructuras que lo sostienen (ligamentos, fascias y músculos). Haciendo que pierdan su posicionamiento habitual y desciendan por la vagina.
Sabiendo que el suelo pélvico está formado en un 80% por tejido que no es muscular, y la mayor parte de la parte muscular que tienes es involuntaria, entonces entendemos porque los ejercicios de kegel solamente NO tendrán excelentes resultados en el tratamiento del prolapso.
En un grado inicial del prolapso, podemos no presentar ningún tipo de síntoma, detectándose en una revisión rutinaria de ginecología o fisioterapia pelviperineal. Sin embargo, en estadíos más avanzados solemos encontrar el prolapso asociado a uno o varios de estos síntomas:
- Problemas urinarios: incontinencia urinaria, urgencia miccional, dificultad para vaciar completamente la vejiga.
- Pesadez en la vulva o en la parte inferior del abdomen.
- Bulto dentro o fuera de la vagina.
- Molestias en las relaciones sexuales, o al introducir un objeto como la copa menstrual o un tampón.
- Síntomas intestinales cómo estreñimiento o aumento de gases.
- Dificultad defecatoria (al hacer caca).
Tipos de prolapso, en función del órgano afectado.
- Histerocele: descenso del útero. Aunque haya habido una histerectomia (te han quitado el útero) esa bóveda que queda en su lugar también puede descender si ejercemos repetidamente presión sobre ella. Imágenes de Portia.
- Rectocele: descenso del recto.
- Cistocele: descenso de la vejiga.
- Enterocele: descenso de las asas intestinales.
- Mixtos: combinación de alguno de los anteriores.
Tipos de prolapso, según el grado de descenso del órgano en cuestión.
Se diferencian cuatro grados según la gravedad del prolapso. En los grados más avanzados es necesaria una intervención quirúrgica para devolver la posición al órgano.
Pero SIEMPRE, siempre os recomiendo sesiones pre y post operatorias para sacar por un lado el máximo partido a la operación, evitar dañarla ejerciendo presiones involuntarias sobre ella y sobre el resto de órganos y recuperar lo antes posible.
Factores de riesgo para tener un prolapso
- Desconocimiento de nuestra zona perineal. ¿Qué te parece si empezamos a descubrirla? Te cuento por dónde empezar aquí.
- Parto instrumentalizado, o maniobra de kristeller
- Pujos o esfuerzos importantes en el postparto reciente.
- Intervenciones quirúrgicas, principalmente pelvianas.
- Condiciones que aumentan la presión en la zona pélvica de manera crónica: trabajos cómo músicos, cantantes, deportistas,….), tos crónica o alergias, estreñimiento,…etc.
- Factor genético. Igual que unas mujeres tienen más arrugas que otras por mucho que se cuiden, aquí también la genética tendrá un rol importante. Y es que conocer cómo son nuestros tejidos nos hará tener mayor o menor precaución y plantearnos mejor nuestros objetivos durante la reeducación en los ejercicios para el prolapso.
Tratamiento o ejercicios para el prolapso, que hacemos en consulta
Quiero contarte el trabajo global que hacemos en consulta. Necesito que entiendo que cada mujer es un mundo, en su individualidad intento siempre trabajar. Es decir, daremos mayor importancia a unas cosas que a otras en función de sus necesidades y de la valoración inicial.
En esta sesión de valoración comprobamos realmente que ha fallado o que está fallando para una correcta o mejor recuperación.
- Corrección postural.
- Trabajo respiratorio y diafragmático.
- Ejercicios perineales musculares, de activación del periné. Los súper conocidos ejercicios de kegel.
- Eliminar puntos gatillos, con masaje, y otras técnicas miofasciales.
- Búsqueda y refuerzo de los automatismos perineales y abdominales ante los esfuerzos, cómo factor de protección.
- Corrección de posturas cotidianas que pueden generarnos picos muy grandes de hiperpresión cómo en la defecación, al toser o coger peso. **La presión en nuestro día a día es ley de vida pero mientras reeducamos intentaremos evitarla en un primer momento hasta ir reintroduciéndola progresivamente. Muy parecido a otras patologías del cuerpo.
- Puesta de pesario en caso que esté indicado. El pesario es un dispositivo vaginal que permite “recolocar” el prolapso para evitar que siga cayendo.
- Aprendizaje de ejercicios activos: cómo abdominales hipopresivos, o tronco con winner flow.
Ejercicios para el prolapso que puedes hacer en casa
En varios post en redes sociales hablo y explico visualmente a qué me refiero con estas indicaciones. Así pues, si me lo permites, te dejaré un enlace para que lo entiendas mejor.
- Empieza por una corrección postural:
- Autoelongación (crecer), es la palabra mágica cuando hablamos de postura. Genera descompresión en las vértebras, abre costillas, alivia el peso sobre el suelo pélvico y aumenta el tono muscular abdominal. ¡Estupendo!
Consiste en andar como una reina, pero ¡sin tensar nuestros hombros, ni bloquear nuestra mandíbula o espalda!
Prueba a ir ganando autoelongación poco a poco. ¿Cuanto sería tu máximo? Pues empieza con un 30% de ese máximo y ve aumentando siempre que estés cómoda. - Si hay problemas de espalda, tensiones lumbares o pélvicas es el momento de trabajarlas, revisarlas y mejorarlas pues influyen directamente sobre el prolapso.
- Autoelongación (crecer), es la palabra mágica cuando hablamos de postura. Genera descompresión en las vértebras, abre costillas, alivia el peso sobre el suelo pélvico y aumenta el tono muscular abdominal. ¡Estupendo!
- Cambia tu postura para ir al baño. Aquí te explico.
- No retengas el pipi largos periodos de tiempo.
- Trabaja de forma voluntaria también tu suelo pélvico, para mejorar su percepción en todas las posturas.
- Protección ante los esfuerzos en los que notes que ejerces una presión hacia abajo o que tu abdomen sale hacia fuera cómo en este ejemplo.
- Haz los esfuerzos en espiración / soplando y no retengas la respiración.
- Busca la activación refleja con ejercicios cómo el tronco (método 5p) o el trabajo del equilibrio.
No quiero engañarte, la recuperación de un prolapso necesita de un trabajo conjunto. Y el trabajo en casa es tan importante o más que en sesión presencial u online.
No dudes en preguntarme lo que necesites. Nos vemos por Facebook e Instagram.
Acerca de Erika Nieto:
Soy Erika, y ayudo a mujeres en las diferentes etapas de su vida, a resolver sus problemas de suelo pélvico para conseguir disminuir su dolor, incontinencia o debilidad de sus músculos, así como acompañarlas en su embarazo y recuperación postparto. Y lo hago a través de un método propio, donde aúno los conocimientos de la fisioterapia y mi experiencia de más de 10 años.
Queremos ayudarte…¿empezamos?
Sin comentarios